El jefe de Estado, Daniel Noboa, ratificó este martes 20 de febrero en una entrevista que los militares continuarán operando en las cárceles de manera indefinida.
«Los militares no van a salir (de las prisiones) en ningún futuro cercano», dijo el mandatario al canal RTS. Más temprano, el jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, Jaime Vela, había señalado que «las Fuerzas Armadas permanecerán en el control de dichos centros hasta que sea necesario».
Consultado sobre cuánto tiempo más iba a extenderse el estado de conflicto armado interno, el presidente no precisó una fecha.
Desde el ingreso permanente de los militares a las cárceles, organizaciones defensoras de los derechos humanos han denunciado excesos y violaciones contra los reclusos. De acuerdo al mandatario, esto no está ocurriendo.
No obstante, un juez ordenó en el plazo de 45 días constatar esas acusaciones.
Tras declarar el conflicto armado interno, el Gobierno identificó a 22 grupos criminales como organizaciones terroristas y actores no estatales beligerantes.
Al señalar a esos grupos como beligerantes, el mandatario abrió una puerta legal para que las Fuerzas Armadas junto con la Policía actúen con todos sus recursos para neutralizarlos.
